8/07/2017

El oscuro corredor. Mirta Rosenber













El origen de la acción

La pasión más fuerte
                                 de mi vida
ha sido el miedo.

Creo en la palabra
                            (dilo)
y tiemblo.






En camino
[fragmento]

A tientas, el ritmo es todo.
Si se cae
             la sombra
se lo traga. Si se acopla
al corazón
                 hace mañana

y hace el amor quien se rehace
cribado
             por lo oscuro.

No es que no tenga futuro. Tengo
urgencia
                y la lejía

dejada en la hornacina. Tengo
esta sombra
                   que aja el clima,

sin tajarse. 








Mi casa era diferente. Mi tía no me crió,
mi abuela prefería a mi hermano. Más sano
hubiera sido preferirme a mí, o más osado.
Sin embargo, todo era perfecto así,
en un sentido errado. Erré perfectamente
el camino, y fue acertado el sino del fracaso
en la presencia. La música fue el caso,
y la poesía, para perderse en los sentidos,
la enfermedad, la experiencia. Parecía
saberlo todo y no hacer nada para impedirlo.
¿Quién podría decirlo, salvo un secreto?









Un rábano me importa, y la figura de las santas
ascendidas de la nada. La nada como ultraje
superior; el amor, sin duda una cuestión
salvaje. ¡Oh el seguro sereno
de quedarse en casa, en el oscuro corredor
de persianas entornadas, y vivir como las plantas!









Trato de usted a yo

que según Gertrude no envejece
como me ha pasado a mí.
Toda una vida en el mismo cuerpo,
de un siglo a otro más harapiento,
que Usted, Stein donde esté,
no deja de negar. Soy a Usted
lo que su Ideal es a mì. Un salòn
donde a Usted se lo oye retumbar:
esta lengua está para decirte
que está diciéndote que es ésta
y que de una vez la escribas.

                                           (Gertrude Stein)









Mirta Rosenberg
El arte de perder y otros poemas
Pre-textos




No hay comentarios: