5/09/2014
Lugares y no lugares para caer muerto en Richard Brautigan
supe que todo era distinto
cuando un avión
chocó con mi oreja
ni siguiera me detuve a mirar
seguí caminando como si nada
descubriendo todo lo que
mi nuevo cuerpo muerto podía hacer
si fuera religioso
diría que dios penetró
en mi cabeza
en forma de bala
si fuera policía
-mirando el arma tirada en el piso
y la botella de whisky a un lado-
bonita pistola y buen whisky
si fuera un arma
diría que fue un trabajo fácil
si fuera mi cabeza diría
¿por qué no te disparaste al corazón
no era él el principal causante
de todo esto?
estaba sentado con la punta
de la pistola en la boca
pero antes de disparar
algo se me vino a la mente:
era un bebé y estaba sentado
por primera vez en mi vida
mi madre me había dejado
un momento solo en un sillón
recordé exactamente
cómo se veía el mundo
desde ahí
disparé contra eso también
vas conduciendo
por una calle tranquila
sin mucho tráfico
es sábado por la tarde
y te diriges al cine
donde te sentarás solo y acurrucado
a reír a tus anchas en medio de la oscuridad
de pronto no recuerdas la dirección
de donde vas
cada calle parece desconocida
y no te queda más que seguir conduciendo
tampoco puedes ni quieres detenerte
la muerte es eso
una tarde de sábado perdida
sin saber ya nunca a dónde vas
murió
en tacoma
en san francisco
en tokio
en montana
en santa fe
en bolinas
murió
de viejo
ahorcado
atropellado
por su propia mano
de un tiro en la cabeza
murió al nacer
mientras nevaba
murió solo
con dolor y sin él
mientras llovía
cuando salía el sol
mientras todos dormían
todavía muere
de ven en cuando
y dice que puede
morir más
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