9/14/2012

las puertas del paraíso (1)











todo es vano, además de los prejuicios y de la vergüenza, la satisfacción de los sentidos no sacia el deseo, de un deseo saciado surgen cien nuevos aún más imperiosos, los actos nacidos de los deseos más puros agonizan en la infamia, tal vez no existan los deseos puros, la necesidad de violencia y de crueldad trastorna la naturaleza del hombre, el hombre la rehuye, se refugia en una soledad cargada de miedo y de vergüenza, después, una vez más en la jauría, fuerte y loco, acomete y difunde la violencia, es ciego, es sordo, pero su fuerza la debe a su locura, hasta que llega el momento de despertar y entonces el hombre se queda otra vez solo, pero debido a la criminalidad de su locura más loco que antes, y en esa soledad definitiva, con el cuerpo y el pensamiento aprisionados, empieza a buscar socorro, pero lo busca en vano, en vano se prende de la sombra de la salvación, solo en la violencia logrará olvidarse de sí mismo, en una violencia ya privada de ilusiones, desnuda y negra como el odio




No hay comentarios: