'¿Adónde ha ido la ternura?'
le preguntó al espejo
del Hotel Biltmore, cuarto 216.
'¿Qué tan probable
sería que la imagen de la propia ternura
en este mismo espejo preguntara también
sobre mi paradero, y en cuál horror camino?
¿Es ella la que miro medrosa contemplarme
detrás de tu barrera
tan frágil y vencida?
La ternura
estuvo aquí, en este cuarto este
lugar, su forma vista, sus gritos escuchados
por ti.
¿Qué confusión advierto? ¿Soy acaso
la imagen cruel que se te superpone?
¿O es ésta el espectro
del amor que solías reflejar,
ahora con un fondo de tequila,
colillas, cuellos sucios,
perborato de sodio, y una página
emborronada para los difuntos
y el teléfono sordo, descolgado?'
Rabioso, destrozó
todos los vidrios de la pieza
(Calcularon los daños en 50 dólares).
Jaime García Terrés, Todo lo más por decir. Mortiz, 1971.
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